Consejos para organizar una sesión de lluvia de ideas

Si la noción de organizar una sesión de lluvia de ideas te genera una sensación de temor, no estás solo. Todos hemos participado de sesiones de lluvia de ideas improductivas en las que se exponen decenas de ideas sin ningún resultado concreto. 

No obstante, con la estrategia adecuada, la lluvia de ideas puede pasar de ser una actividad aburrida y atemorizante a un medio divertido, eficiente y productivo para solucionar problemas y llevar nuevas ideas a la práctica. Sigue estos consejos para darle a tu sesión de lluvia de ideas el liderazgo y el enfoque que necesita para alcanzar resultados.

¿Qué es una sesión de lluvia de ideas?

Una reunión clásica de lluvia de ideas es un encuentro en el que un grupo de personas se centra en generar ideas o soluciones nuevas para un área de interés principal. El grupo anota, analiza y evalúa cada idea sin juzgarla ni criticarla. 

La sesión de lluvia de ideas que todos conocemos se originó en la década de 1930, cuando un ejecutivo publicitario descubrió que su equipo era mucho más efectivo en la generación de ideas cuando lo hacía en grupo. Hoy en día, este tipo de sesiones se reconocen como una poderosa herramienta colaborativa en prácticamente todas las industrias. 

¿Por qué es importante la lluvia de ideas?

La lluvia de ideas ofrece varias ventajas, tanto a nivel individual como grupal. Mediante la creación de un ambiente en el que se pueden plantear y diseccionar las ideas sin juzgarlas, se permite el análisis de conceptos innovadores y novedosos que podrían no ser propuestos de otro modo. La capacidad de colaborar de manera abierta y cómoda puede introducir distintas perspectivas y soluciones, que tanto tú como tu equipo pueden mejorar, ampliar y llevar a la práctica. 

La lluvia de ideas también es fantástica para generar una gran cantidad de ideas de manera rápida. En lugar de quedarse bloqueado con ideas mediocres y predecibles, tú y tu equipo pueden trabajar con una mayor cantidad de ideas para encontrar el punto final ideal. Como ningún miembro del equipo tiene, en sí mismo, la propiedad de tu resultado final, tu equipo puede mejorar su capacidad de trabajar juntos como unidad inclusiva y colaborativa que valora la creatividad y los resultados por encima del crédito. 

Cómo organizar una sesión de lluvia de ideas

Aunque las sesiones de lluvia de ideas ofrecen muchos beneficios, también pueden convertirse en reuniones poco productivas en las que los integrantes más directos del equipo o las ideas deslucidas dominen la conversación. Para maximizar la eficiencia de tu reunión de lluvia de ideas, te presentamos algunos consejos:

1. Define tu tema o problema

Comienza tu sesión de lluvia de ideas presentando una pregunta o un tema problemáticos para su análisis. Enfoca tu sesión de lluvia de ideas planteando a tu grupo una pregunta con soluciones que se puedan implementar, por ejemplo, "¿Cómo podemos bajar los costos de producción?" o "¿Cómo podemos aumentar las interacciones en las redes sociales? A continuación, establece límites claros para tu equipo, incluidos los posibles límites de tiempo, presupuesto o limitaciones de la organización.

2. Sienta buenas bases

Antes de sumergirse en las ideas nuevas, repasa lo que tu equipo ya conoce acerca del problema o del tema. Define los términos clave, revisa las soluciones que ya han probado implementar y comparte cualquier otra información clave que tu equipo necesitará para ofrecer posibles soluciones. 

3. Fija la agenda para la sesión de lluvia de ideas

Las sesiones de lluvia de ideas funcionan mejor con un poco de estructura. Dale a tu equipo las guías que le permitirán mantenerse enfocado sin obstaculizar el proceso creativo. 

• En primer lugar, debes dejar tiempo para analizar el tema central, los límites, las definiciones y el contexto valioso. 
• A continuación, deben dedicar algo de tiempo para generar y analizar ideas nuevas.
• Por último, deben reunirse para ordenar, analizar y llegar a un consenso sobre las mejores ideas. Esto puede incluir una votación formal en la que el consenso del grupo quede claramente establecido.

4. Elige tu técnica de lluvia de ideas

Cómo se proponen las ideas es importante. Estas son algunas técnicas creativas para la propuesta de ideas que tú y tu equipo pueden usar para inspirar un pensamiento más innovador:

• La técnica de la escalera: Presenta a un miembro del equipo a la vez para promover las propuestas de todos, incluso los miembros más callados del grupo.
• Lluvia de ideas escritas: Es un enfoque escrito para la lluvia de ideas que puede emplearse para generar y elaborar las ideas de manera más exhaustiva.
• Lluvia de ideas inversa: Puede emplearse para mejorar ciertos servicios o productos.
• Lluvia de roles: Les pide a los participantes que propongan ideas mientras asumen la identidad de un grupo (por ejemplo, tu cliente) para poder desarrollar una perspectiva adicional.

Determina tus herramientas

Independientemente de que hayas elegido una sesión de lluvia de ideas física o virtual, las herramientas adecuadas pueden facilitar la participación de todo el grupo, evitar la pérdida de tiempo y mantener organizada la sesión de lluvia de ideas. Determina qué herramientas usarás antes de empezar, y verifica que tu equipo esté preparado para usarlas antes de que empiece la sesión. 

• Notas adhesivas: Las notas adhesivas son una herramienta comprobada para la propuesta de ideas que se emplea para registrar y organizar las ideas, generalmente en una pizarra. Las notas adhesivas pueden ordenarse fácilmente por colores, editarse, desecharse, reacomodarse y mucho más, de modo de pintar un cuadro preciso de tus ideas. Además, las notas adhesivas pueden implementarse de manera virtual con un programa como Lucidspark. Solo ingresa tu información en la nota adhesiva o sube tu texto de un archivo CSV o de una planilla de Excel para crear notas adhesivas en montón.
• Temporizador o sistema para controlar el tiempo: Un temporizador o una alarma pueden permitir que tú y tu equipo se mantengan concentrados a medida que avanzan de una a otra fase de la lluvia de ideas. Fijar un plazo también te puede permitir programar recesos breves durante los cuales el grupo puede reconfigurarse y recargar. 
• Pizarra: Las sesiones presenciales de lluvia de ideas, por lo general, incluyen alguna versión de la pizarra clásica para mostrar las ideas a medida que se presentan. 
• Pizarra en línea: Una pizarra en línea como Lucidspark puede registrar y organizar las ideas de varios usuarios, incluso cuando los miembros del equipo están trabajando de manera remota. La pizarra en línea de Lucidspark viene con herramientas tales como un editor de notas para una toma de notas centralizada, notas adhesivas, un cronómetro y plantillas de diagramas que le agregan estructura a los pensamientos de tu equipo. 

Haz que sea breve y simple

Cuanto más dure la sesión de lluvia de ideas, más probable será que tu equipo pierda la concentración. En lugar de programar una reunión más larga en la que tu equipo tiene probabilidad de cansarse, pídele que asista a la reunión preparado con algunas ideas que les permitirán tener una sesión productiva. Limita las sesiones a pulsos breves de 15 a 30 minutos con recreos cortos en el medio para permitir una productividad máxima y evitar el agotamiento.

Además de programar una reunión más corta, considera restringir el grupo para la lluvia de ideas a los miembros que sean esenciales y que sabes que podrán aportar ideas valiosas en la sesión de lluvia de ideas. Un grupo de 10 o menos personas permitirá que se escuchen distintas ideas sin sobrecargar la sesión con demasiadas voces.

Concéntrate en la cantidad

¡Leíste bien! Si te concentras en la cantidad y no en la calidad, podrás facilitar una reunión en la que puedas producir muchas ideas que, eventualmente, pueden llevarte a la idea correcta, en lugar de esperar la idea "perfecta". En definitiva, la cantidad debería facilitar la calidad permitiendo que el equipo analice pensamientos divergentes e innovadores.

Enfócate en compilar las ideas rápidamente y luego regresa para reflexionar y elaborar las ideas que hayan compartido previamente. Cada idea debe expresarse y registrarse de manera simple para evitar que el equipo se centre demasiado en los detalles. 

Evita las críticas

Las sesiones de lluvia de ideas funcionan mejor en entornos abiertos, alentadores y contenedores en los cuales los participantes se sienten libres para expresar cualquier idea. La crítica es contraproducente para el proceso creativo, desalienta posibles ideas que promueven el pensamiento e impide que los participantes abran la boca por temor a ser juzgados. 

Acoge lo inusual

Aunque podrías no estar buscando ideas estrafalarias o locas, estas pueden servir para disparar pensamientos mejores y más innovadores. Alienta a los participantes para que encaren el tema o el problema sin presunciones o desde un punto de vista nuevo para promover ideas más innovadoras. 

No solo deben expresarse verbalmente todas las ideas; todas deben registrarse y volver a considerarse. Ninguna idea es demasiado loca para ser considerada.

Combina las ideas y desarróllalas

Uno de los beneficios de trabajar en grupo es la sinergia que proviene de alimentar las ideas de otros. Motiva a tu equipo para que escuche todas las ideas compartidas dentro del grupo y las utilice como inspiración para sus propias ideas. La capacidad de analizar minuciosamente, elaborar y mejorar las ideas que ya se han compartido puede ser tan valiosa como la posibilidad de generar ideas de la nada. También puede ser un muy buen ejercicio para alentar la atención y el fortalecimiento del equipo entre los integrantes de tu equipo.

Haz la lluvia de ideas en línea

Cuando no es posible organizar la sesión de lluvia de ideas en persona, un software de lluvia de ideas en línea como Lucidspark puede proporcionarte el espacio, la estructura y la flexibilidad que necesitas para generar y compartir ideas con tu grupo. Con espacio infinito para extenderse y proponer ideas nuevas, además de herramientas para mantener activa la reunión y alcanzar un consenso, Lucidspark puede permitirte facilitar una reunión enérgica y productiva en la que salgan a la luz tus mejores ideas. 

Cuando estén proponiendo ideas en línea, asegúrate de que tu equipo venga preparado con ideas listas para ser propuestas. Usa el espacio de tu pizarra para armar grupos pequeños, si hace falta, y luego convoca a los participantes para que se unan con el anfitrión de la reunión cuando sea momento de compartir las ideas en el grupo. Pueden votar las ideas para asegurarse de que solo las mejores se conviertan en propuestas de acción.

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